HOW I GOT STUCK FOR ONE NIGHT IN LIÈGE

Liège. No sé si llamarla la ciudad de mi suerte o de mi desgracia. Empezaré por el principio.

En Noviembre fui a ver a Flora (podéis verla en otras entradas como ésta o ésta) que está estudiando en Maastricht, y me cogí un blablacar que llegaba hasta Liège para desde allí coger un bus (de Flixbus) hasta Maastricht. El blablacar me dejaba al mediodía en la ciudad y tenía hasta las diez y media de la noche (unas 7 horas) libres hasta que llegase el autobús. Ningún problema, pensé yo, así puedo ver también la ciudad de Liège, dos en uno. Pues bien, sí que hubo un problema. El autobús no llegó a mi parada, aunque la chica intransigente y maleducada del servicio al cliente se empeñase en lo contrario. Así que allí estaba yo, Helada de frío y con dos mochilas, a las 11 de la noche en medio de un parking en el que había un cartel de Flixbus que me decía que el autobús tenía que haber pasado a esa hora, sin comida y sin transporte. Aunque mis ganas de echarme a llorar de la rabia superaban los límites me recompuse y pensé: eso no va a solucionar la situación. Así que me tragué las lágrimas y empecé a barajar soluciones. ¿Un tren? ya se había ido el último. ¿Taxi? 200 euros, que superaba en 10 veces la cantidad de dinero que yo tenía. ¿Dormir en la estación? Demasiado frío. Y porfín encontré una habitación en el único hostal de la ciudad (es así de pequeña) que costaba 21 €. Me quedé a dormir allí y al día siquiente me cogí el primer tren hacia Maastricht. Y eso ya es otra historia que contaré en la próxima entrada. En mi canal de youtube podéis ver cómo pasó todo.

Aun así, creo que no es un ciudad que vaya a odiar. Es súper bonita y acogedora. No me decepcionó ni en esos momentos tan difíciles en los que estaba sola andando por una ciudad ajena. Mil puentes con luces, gente, edificios increíbles, calles estrechas con encanto, tenéis que ir. Además, los gofres que conocemos los españoles (ovalados) son originarios de allí! Espero que os gusten las fotos. xxx

Liège. I don't know wether to call it my lucky or my misery city. I'll start from the top. 

Back in November I went to visit Flora (who you can see before here or here) who's studying in Maastricht. So I took a blablacar that brought me to Liège and from there I would get a bus (from the Flixbus company) to go to Maastricht, but I had a 7 hour layover in Liège. No problem, I thought, that way I can see this city too, two in one SCORE! But well, there did was a problem. The bus never came to  my stop, even though the intransigent bad-mannered lady at the phone insisted on the opposite. So there I was, at 11pm in the middle of a taxi parking lot, next to a signpost that stated the useless non-true timetable of this company's buses, stone cold, with no food and no transport. At that time, my anger made my urge of crying go over the limits, but I thought: hey, that's not gonna solve anything. So I swallowed my tears and started to look for solutions. Train? The last one had already left. Taxi? The fare was 200 euros, which surpassed the quantity of money I had times 10. Sleep at the train station? Too cold. But lastly I found a room on the only hostel in the city, for 21€. I slept there and got the first train to Maastricht in the morning. But that's a story for my next post. You can see how it all went down in my youtube channel. 

Even though, I don't think Liège is a city I am going to remember with a bad connotation. It is super pretty and charming. It didn't let me down even in the hardest of moments while I was wandering the streets of a foreign city. A thousand bridges lighted up at night, the people, amazing buildings, narrow streets that looked like taken out from a book, you HAVE to go. Also, the waffles we know in Spain (oval shaped) are native from there! Hope you like the pics.

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